He venido insistiendo; o, mejor dicho, he venido arando en el desierto, tratando de hacer consciencia de que se debe de acabar con el probadamente nefasto presidencialismo. O vivimos en una verdadera República bajo un Estado de Derecho; o nada va a cambiar; como no sea para empeorar…
Da igual quien sea y de qué Partido provenga; todos son más de lo mismo. Ya podrá decir el Presidente su cantaleta de que no son iguales; son peores. Lo tenemos más que probado. Hasta parece maldición, pues quien se sienta en la Silla pierde piso y vive en otra realidad…
Lo que por otro lado es lógico, no solo porque hay que estar muy templado para resistir las tentaciones -mismas que a cada cual se le presentan de diferente manera-. Sino porque siempre les dan otros datos…
De hecho, no es que sean mentirosos, es que están mal informados; y consecuentemente dicen y hacen barbaridad y media. Por eso ya nadie les cree. Sobre todo, ahora que están saliendo a la luz los nexos que tienen las Autoridades con los malosos –aparte de sus hermanos y parientes ¡Claro!- quienes a cambio les financian sus campañas…
Haciendo evidente que el “abrazos no balazos” le ha estado funcionando muy bien; ya hasta son socios. Solo que ese tipo de relaciones nunca terminan con un final feliz…
Pero en fin, mientras tanto, el Presidente envió al Secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez a Perú, a “apoyar en lo que podamos, pues están atravesando una situación difícil” -¿Al Secretario de Hacienda a apoyar? ¿Estará pensando en enviarles unos cuantos millones de dólares, como hizo con Bukele el Presidente de El Salvador?- Y agregó:
“El Presidente Pedro Castillo nos pidió apoyo ¿? porque enfrenta una campaña mediática, además alentada y emparejada con la inflación. Pero allá dicen que es por incapacidad, cuando es una cuestión internacional”. Y dijo más…
“Fuimos hasta allá, siendo respetuosos, a apoyar, sobre todo lo que se puede hacer para ayudar a la gente humilde, pobre. En tiempos difíciles, tenemos que apoyar a los Pueblos Hermanos”. Cuando aquí el kilo de tortillas sigue subiendo y la gente está cada vez es más pobre…
Esas actitudes de andar saludando con sombrero ajeno son a todas luces reprobables. Como que a los mexicanos nos está saliendo muy caro que AMLO se ande haciendo propaganda como líder internacional, pero con nuestro dinero. Además, de que el buen juez, por su casa empieza…
Y finalmente, sería bueno saber quién autorizó que se destinaran esos dineros a otros fines que no sean para beneficio de los mexicanos; a quienes tanta falta les hace…
Y hablando de dineros, la revocación de mandato que podría enviar a López Obrador a su Rancho, es prácticamente tirar el dinero a la basura; cuando esos dineros se puede utilizar para comprar los medicamentos para los niños con cáncer…
Lo que sin duda podrá llegar a ser la peor presentación del tabasqueño; ya que fue su absoluta responsabilidad el que faltara la atención médica al desaparecer el Seguro Popular para instalar lo que nunca se ha instalado, dejando a la población a su triste suerte…
A nadie ha convencido el Presidente López Obrador con su necedad de decir que no faltan los medicamentos; y menos a los citados padres de los niños con cáncer, que le han manifestado sus angustias, obteniendo como respuestas solo evasiones y engaños…
Pero las situaciones se repiten. A los políticos les encanta gastarse el dinero en su propia promoción; aunque sepan que no les servirá de nada y que tirarán el dinero a la basura…
Como sucedió en la reciente elección a la Alcaldía de Xalapa, donde solo los trasnochados pensaban que tenían alguna posibilidad de ganarle a Ricardo Ahued…
Por cierto, que Hipólito quien seguramente se irá a su casa después del mal papel que ha desempeñado. Le deja un paquete muy difícil. La Ciudad está hecha pedazos y en manos de la delincuencia…
La ventaja es que hay mucho por hacer; por lo que todo lo que lleve a cabo la nueva administración, sin duda que será digna de tomarse en cuenta; sobre todo cuando se gobierna atendiendo a los ciudadanos, no evadiéndolos
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida. |
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