.- Ante las presuntas irregularidades registradas en las elecciones internas para la renovación de la dirigencia estatal del PAN, el aspirante Joaquín Rosendo “El Chapito” Guzmán Avilés anunció que impugnará los resultados ante los tribunales electorales y esta misma tarde un grupo de simpatizantes de su candidatura tomó las instalaciones del Comité Directivo Estatal en Xalapa. Con todas sus letras, Guzmán Avilés advirtió que alrededor de 10 mil militantes no quieren estar en un PAN que está manchado por lo que buscan un cambio para bien del instituto político. Una a una, el candidato a la dirigencia estatal denunció las anomalías que se presentaron antes y durante el proceso interno, por lo que confió que el resultado será revertido. Entre otras, enumeró que hay más votos nulos que la diferencia que existe entre los candidatos, situación que fue señalada ante la Comisión Organizadora Electoral. Incluso subrayó que la propia convocatoria indicaba que si alguno de los candidatos solicitaba la apertura de las urnas ésta se tendría que dar, situación que no fue atendida. También denunció la presencia del subsecretario de Gobierno durante la sesión del cómputo, argumentando que era representante del otro candidato. Otra de las arbitrariedades fue la instalación de casillas en domicilios particulares, cuyos propietarios anduvieron en la campaña de “Pepe” Mancha, acción que también fue señalada ante la comisión organizadora. Además, Guzmán Avilés recordó que previo a la jornada electoral se presentó la coacción del voto con la entrega de despensas y recursos a los militantes, acción que ya fue denunciada ante la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales (FEPADE) para que lleve a cabo la investigación correspondiente. Y por último, denunció que más de mil panistas de la zona norte no pudieron ejercer su voto, debido a que los integrantes de las casillas no les permitieron hacerlo argumentando diversos motivos. En este contexto, el delegado nacional del Comité Directivo Nacional del PAN, Benjamín Cermeño, anunció que la entrega de la constancia de mayoría de votos al ganador de la elección de la dirigencia estatal del partido se dará hasta que se hayan resuelto todas las impugnaciones que se presenten. Lo anterior luego de que la Comisión Organizadora de la Elección informó sobre el triunfo de José de Jesús Mancha Alarcón en la contienda y de que su oponente, Joaquín Rosendo Guzmán Avilés, advirtió que impugnaría el resultado. Sin embargo, el delegado del Comité Nacional consideró que no hay elementos para impugnar la elección de dirigente estatal, y justificó que los lineamientos no marcan que se pueda realizar un recuento total de votos porque no se cumplen los requisitos. Contrario a lo que dijo Guzmán Avilés, el delegado afirmó que su reglamento interno marca que solo se puede hacer un recuento de votos total en las casillas en las que la diferencia entre el primer y segundo lugar sea mayor al número de votos nulos. Por ello, aseguró que la petición que hizo el equipo del candidato a la dirigencia estatal del PAN, Joaquín Guzmán Avilés, no estuvo bien fundamentada. Sobre la denuncia que hizo Guzmán Avilés en el sentido de que el cómputo se hizo sin que la Comisión contara con todas las actas de la elección, indicó que sólo faltó una de las actas. "Es un cómputo que se realizó con 165 de las 166 actas, y que la otra acta no es determinante en el resultado de la elección". Sobre la presencia del subsecretario de Gobierno, Lauro López Zumaya, en la sesión de cómputo, dijo que está en su derecho porque es militante de Acción Nacional. El representante del CEN destacó la gran participación de los veracruzanos en este proceso interno, en el cual votó el 83.4 por ciento del padrón total y consideró que fue una jornada copiosa que transcurrió sin ninguna incidencia mayor. Ante las críticas sobre el proceso, dijo que el PAN debe salir unido para que Veracruz vuelva a ser gobernado por Acción Nacional. "Eso únicamente lo vamos a poder lograr cuando todos los panistas trabajemos unidos".
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