| En los primeros cinco meses del año, los ingresos al erario público por concepto de impuestos a la gasolina y diésel totalizaron 71 mil 704 millones 300 mil pesos, es decir 15 mil 159 millones 400 mil pesos menos que en 2017, lo que implica una caída de 17.45 por ciento en los ingresos tributarios por el IEPS a gasolinas y diésel que, si bien es menor a la registrada en el mismo periodo del año pasado, refleja una tendencia a la baja. |
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Especial.
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.- En los primeros cinco meses del año, los ingresos al erario público por concepto de impuestos a la gasolina y diésel totalizaron 71 mil 704 millones 300 mil pesos, es decir 15 mil 159 millones 400 mil pesos menos que en 2017, lo que implica una caída de 17.45 por ciento en los ingresos tributarios por el IEPS a gasolinas y diésel que, si bien es menor a la registrada en el mismo periodo del año pasado, refleja una tendencia a la baja. De acuerdo con la estadística del Servicio de Administración Tributaria, de Enero a Mayo de 2017, la recaudación por IEPS a combustibles automotrices fue de 86 mil 863 millones 700 mil pesos, cifra que comparada con el mismo periodo del año anterior registró una caída de 25.39 por ciento. Para este año, de acuerdo con la Ley de Ingresos de la Federación, se prevén ingresos por concepto del impuesto Especial Sobre Producción y Servicios sobre las gasolinas y el diésel por un monto de 258 mil 633.6 millones de pesos, meta que a decir del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria podría no alcanzarse. Esto se explica por los altos montos de subsidio que aplica Hacienda para mantener estable el precio de la gasolina y el diésel. Hay que recordar que el precio del petróleo y la cotización del tipo de cambio son los dos principales factores que determinan el precio de los combustibles. A éste se añade el impuesto IEPS, que para este año se fijó en 4.59 pesos por litro para la gasolina Magna, 3.88 pesos para la Premium y 5.04 para el diésel. No obstante, debido a la fuerte depreciación que durante los primeros meses del año registró el peso, el precio de la gasolina se incrementó significativamente; lo que obligó al gobierno federal a aumentar el subsidio que aplica sobre el IEPS.
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