Sin que haya habido un compromiso formal; así como para un “Llueve, truene o relampaguee”, aunque se había fijado la fecha, dio inicio el Gas Bienestar. Y ¡es más barato! del que vende la ahora “competencia”…
Y aunque los camiones repartidores no llevan báscula para checar el peso, pues ya se sabe que muchos dan de menos, hay confianza en que sigan el ejemplo de honradez del señor Presidente…
Y como es más barato, se espera que se hagan largas filas para adquirirlo; pues los repartidores ya no lo desconectan y lo llevan hasta el camión, que ya no recorre las colonias, sino que se para en una esquina y llaman a la gente anunciando su presencia…
Eso sí, si es la primera vez tiene que comprar el cilindro; y si quiere cambiarlo, el que entregue a cambio deberá de estar como nuevo, lo que será difícil que suceda…
Por ser el arranque, es de suponerse que se tomará en cuenta el dar un buen servicio para así establecer una seria competencia. Ya que quien se quede en casa para ver si pasa el del gas, no siempre tendrá las condiciones para manipular el tanque…
Se le desea éxito; pero no vaya siendo, que en una de esas se le ocurra que los del gas estacionario lleven su propia manguera hasta el camión; y menos si no saben conectarla…
Pero una prueba más de que al Presidente lo volvió loco el Poder -según sus propias palabras- de que ya oye pasos en la azotea. Es que presume que México ha recuperado el liderazgo en Iberoamérica…
Lo que no solamente es tan falso como las buenas relaciones con Washington; pues omite, que ese “liderazgo” ha costado como 2 mil millones de pesos que ha regalado a otras naciones; más o menos como el dinero electorero que anda repartiendo. Quiere la nueva OEA…
Pasando por alto, que no se debe de saludar con sombrero ajeno. Porque ese dinero que “regala” tan fácilmente, no es suyo. Además de que habría servido para comprar medicinas. Al igual que el billón de pesos que ha ahorrado con la austeridad con la que se ha manejado su Gobierno…
Solo que el precio ha sido muy alto, pues fue a costa de la muerte de quienes no recibieron atención médica. Lo peor del caso es, que todavía presume de que ha cumplido 98 de las promesas de campaña. Que solo le faltan dos. De verdad que hay que tener la cara muy dura para decir eso…
La Historia lo va a juzgar como a un criminal, a quien le importó más el dinero, que la vida de los niños que han fallecido de cáncer; y cuyos padres lo siguen por donde quiera que va para reclamarle justicia. Pero solo se alcanza a escuchar que a él lo respetan; o que el Presidente no es rehén de nadie…
Y a propósito de la importancia que le dan al dinero, por sobre la vida. Desde mi muy personal punto de vista, a pesar de que la mayoría opina que la incursión yanqui en territorio afgano fue un total fracaso; yo pienso que no es así…
Sin soslayar lo acertada de la opinión de la cancillería china: “promocionar la narrativa de democracia versus autoritarismo, es atacar a otros, que son diferentes, bajo la bandera de la democracia. Eso es hegemonía disfrazada de democracia. Las naciones deben de tener la libertad de gobernarse como prefieran”…
Si Washington fue a meterse en Afganistán, se suponía que fue porque iban a derrocar a los dictadores talibanes e instaurar la democracia. Cuando hace unos días se retiraron, los talibanes regresaron. Y ahora se dice que Washington va a pedirles apoyo para combatir al Estado Islámico -para eso les dejaron el armamento-…
Luego entonces, la supuesta invasión no fue un fracaso; pues cuando se retiraron, se producía cinco veces más goma de opio que cuando llegaron -y ya procesada como heroína, lo que hace 20 años no hacían-…
Y si pudieron surtirse de heroína durante todo ese tiempo, no fue un fracaso. Si los contribuyentes invirtieron en la guerra del opio miles de millones de dólares -una guerra del opio más; pues no ha sido la primera, los yanquis son alegres consumidores- fueron muchos más los miles de millones que recuperaron con la venta de la heroína…
Que lo mismo y se la vendían al propio Gobierno. La heroína es indispensable para los soldados que están en algún frente de batalla…
¿Y las muertes de civiles y soldados qué? Pues igual que los niños con cáncer; primero está el dinero ¿O no? ¡No se puede todo!
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida. |
|