El presidente ya no aguantó el confinamiento. Fiel a su estilo personal de gobernar, dicen los que lo conocen, que él no está hecho para esas cosas, ni para escritorios ni para desarrollar ideas sentado, su vida es caminar y caminar como en campaña, y anuncia una gira para inicio de semana, primero pensó venirse en avión y hasta ponerse cubrebocas, si lo exigía la línea aérea, pero luego lo desechó y se va por tierra, a meterse 1 mil 608 kilómetros por carretera (19 horas en auto), por ahí ira comiendo y durmiendo dónde se pueda, luego pueblea por: Mérida, Campeche, Villa Hermosa, Dos Bocas, Coatzacoalcos, Minatitlán y Sayula de Alemán, y de ahí de nuevo de regreso por tierra a Ciudad de México, cuidado, no vaya a ser la de malas que su Estado Mayor Presidencial encuentre en las Cumbres de Acultzingo, autopista tramo Orizaba-Esperanza, a esos malosos que ponen retenes para asaltar, más vale que lo acompañen bien el Ejército y la Guardia Nacional, ambos juntos. Unos dicen que viene a apapachar al gobernador de Veracruz, muy caído en las encuestas, que fue zarandeado por Rementería, de quien ya hizo férrea defensa presidencial en una mañanera cuando Julén lo acusó de tentón, a él y a parte de su equipo. En la mañanera reciente, AMLO habló de Yunes Linares: “El que era su contralor (de Duarte) entró el nuevo gobernador (Yunes) y lo hizo diputado o presidente municipal”. Y remató con su: “Cuitláhuac es honesto”. Por allí seguro también viene la famosísima Nahle (Rocío), secretaria de Energía que casi derrumba las relaciones con Canadá, por esa Ley Bartlett y Ley Nahle, aunque la secretaria ya tuvo su revés cuando un juez federal suspendió indefinidamente el acuerdo del CENACE, que frenaba las energías limpias. Por lo pronto detuvieron eso, y las compañías pueden seguir surtiendo de energía a CFE. Esa es orden presidencial, Nahle y Bartlett y todos sólo obedecen órdenes de un presidente que poco los deja decidir. En fin, veremos su primera gira después del confinamiento a que lo sosegó el Coronavirus, el único que lo ha podido tener tranquilo en Palacio Nacional.
ALGO DE FUTBOL
El futbol mexicano es muy ratonero, porque los dueños de los equipos de la Liga MX no dan oportunidad a los jóvenes al preferir maletas extranjeros y alinearlos de titulares, solo Chivas mantiene a puro mexicano. Es un negocio redondo para ellos, como aquel lema comercial veracruzano de Casas Castilla: “Desde la puerta hasta el fondo haga negocio redondo”. Todo nos ocurre cuando vamos a los Mundiales. Allí no pasamos la prueba el añejo, los jóvenes se pierden y no salen nuevas figuras. El Tata Martino, gente seria, entrenador de la selección mexicana, habló con ellos en una junta y les hizo ver esa necedad. Pues hicieron poco o casi nada, apenas y cedieron a eliminar un jugador extranjero. Hasta el clausura 2020, los equipos podían registrar 12 futbolistas y alinear a 10. Ha habido casos donde el Tuca Ferreti, el que adora a los extranjeros, ha alineado a 9 o 10 jugadores extranjeros, valiéndole todo. Ahora cedieron y solo uno menos contratarán, 11 y 9. Atrás quedaron aquellos años cuando en Ciudad de México, por disposición presidencial solo se permitía alinear a dos o tres extranjeros. En 1943-1944 entre la visión del América y el Atlante con el general José Manuel Núñez y por Decreto presidencial de mi general Manuel Ávila Camacho, solo cuatro extranjeros alinearían, pero comenzaron a hacer trampa, los españoles entraban como mexicanos y los extranjeros se naturalizaban mexicanos, aunque no hablaran el idioma ni se supieran el Himno Nacional, como lo hacen ahora y por eso así pagamos nuestros juegos en el Mundial, donde el quinto partido solo lo soñamos. Hay que echar fuera a Yon de Luis, el que desafilió y corrió a Fidel Kuri y a los Tiburones Rojos del Veracruz, ese solo atiende los intereses de las televisoras, y nombrar un verdadero Comisionado que ellos mismos decidan.
www.gilbertohaazdiez.com
|
|
