Cualquiera que tenga duda respecto a la indisoluble relación mujer y hombre es un enajenado, o tal vez marciano, pero de siempre, el hombre ha sido dependiente de la mujer, sencillo de comprender, fue creado y lanzado a la vida mundanal desde el vientre de una mujer, es parte de ella, concebido, conformado, deformado y desarrollado merced al metabolismo humano normal, simple y elemental, al ser producto de una mujer, el hombre tiene de siempre, disposición natural para buscar a la mujer y estar unido a ella, para vivir normal, con instintos animales, sentido de la vida especial, humano.
Tanto el hombre como la mujer, por causa y derivado del ámbito en que se desarrollan, crean un sentido de la vida, vivir, con ciertas cualidades que le conforman, dependiendo de las características personales, su entorno, antecedentes familiares y demás aspectos humanos que generan la personalidad del individuo, lo anterior crea un ser cargado de defectos y virtudes, la aplicación de ellas hacen del individuo(a) un ser de comportamiento, respuesta a la forma en que crea el desarrollo como ser humano, surge entonces el profesionista científico dado a la investigación, el filántropo o misántropo que afecta su entorno y el de seres que le acompañan, aparecen los desequilibrados en forma espontánea, sin estar cargado de defectos por causas ajenas, estos seres humanos que odian al prójimo y a ellos mismos, producen los fenómenos existenciales que lamentamos quienes somos afectados por el solo hecho de sufrirlos y estar en contacto con esos seres anormales.
Estamos viviendo tiempos difíciles, siempre los hemos vivido, gozado o sufrido, pero aparentemente los medios modernos de comunicación producen la rápida difusión de los acontecimientos que lamentamos, se viralizan, palabra rara que multiplica su conocimiento, como lo hace un virus del que no estamos vacunados, lo que está pasando, ha pasado en otros tiempos, pero las PC´s aún no tenían la particularidad e viralizar acontecimientos, por conocerlos y multiplicarlo vía el amarillismo, la sociedad se espanta, reacciona y se queja, queja inútil, pues lo que es afectado no es nuevo, siempre lo ha sufrido o disfrutado, pero sin ser viralizado.
Mucho arguende hacemos hoy por la actitud de varones afectados por una personalidad conformada por actos deleznables, eso siempre se ha dado, viralizan el hecho de que un varón ataca, hiere y hasta mata a una mujer, acción que se ha dado toda la vida, pero que al virilizar la mala acción, la sociedad se espanta y las damas en general arman la protesta que hoy están armando, paralizando la actividad creativa, seguro al rato aparecerán los machos que también sufren por las acciones de algunas féminas, van a querer hacer paros, que solo hacen para dejar a un lado el trabajo, vagar sin control.
Es tiempo de viralizar el amor espontaneo que surge de la relación hombre/mujer, con iniciativa de ambas partes, nada nuevo, e imploro a todos los dioses porque esa actitud permanezca en el ánimo de ambos sexos; dice la sentencia religiosa, “Amaos los unos a los otros” me gusta, por mi parte amaré a las otras. “AGUAS”
Febrero 23 de 2020 lmwolf1932@gmail.com Luis Martínez Wolf |
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