De muy niño, en mi barrio y en la escuela primaria, tenia compañeros homosexuales, en particular dos de ellos personas notables, en tercer año de primaria leían en forma rutinaria el Selecciones y en ocasiones llevaban libros de contenido un poco difícil para infantes, les estimaba y respetaba, defendiéndoles en ocasiones del abuso de otros niños precoces, que trataban de abusar de ellos, cuando no lograban su propósito los atacaban a puñetazos, era yo el defensor y de siempre he respetado a los homosexuales, sin ser proclive a la tendencia en el ámbito sexual. Me daba tristeza su actitud o tendencia sexual.
Ahora todo está cambiando, semejante a la toma del poder del feminismo, los homosexuales acometen posturas sociales, políticas y económicas, alcanzando posiciones semejantes o mejores que los heterosexuales, valida su lucha, pero estamos acostumbrados a respetar cierta forma de vida que es natural, el matrimonio es una de esas prácticas respetadas de toda la vida, se casa una mujer con un hombre y de la relación de pareja surge la familia, es la forma normal de comportarnos y ver la vida, querer cambiar las costumbres o hábitos naturales puede causar trastornos en la sociedad.
Nadie se asombra ni espanta cuando conocemos a una pareja de homosexuales que deciden vivir en el mismo hogar, llevan una vida respetable y se comportan en público como cualquier otra persona, siendo del mismo sexo, no pueden procrear hijos, pero han sabido soportar esa limitación de pareja y la sociedad les respeta cuando no desvían sus hábitos, pretendiendo promiscua relación entre varios, más de dos de estas personas.
No estoy de acuerdo con la propuesta de corte legislativo, planteando que los homosexuales formen pareja matrimonio, con los mismos derechos y obligaciones de los heterosexuales que procrean hijos, se dará la relación de matrimonios en que unos son homosexuales y otros heterosexuales, las reuniones caerán necesariamente en abordar temas que han sido restringidos en el actual existir de la humanidad. ¿Hasta donde llegará la postura de los asociados en familia siendo diferentes en su comportamiento sexual? lo ignoro, pero de siempre el homosexual ha sido agresivo en busca de satisfacer su instinto, en reuniones sociales puede darse el caso de que uno de los homosexuales trate de tener contacto sexual con uno de los heterosexuales, los problemas pueden ser de gran dimensión, mortales.
Dejemos que los homosexuales vivan en pareja, en atención de las leyes de los civil, pueden celebrar contrato de asociación de los bienes que formen en pareja, pero el vínculo y la figura legal “matrimonio” debe ser mantenido con las obligaciones, privilegios y respeto a lo natural. “AGUAS”
Enero 29 del 2020 lmwolf1932-email.com Luis Martínez Wolf |
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