Pocos nos enteramos de la visita realizada ayer por la funcionaria responsable de la Secretaría de Bienestar, (antes SEDESOL) atendiendo la responsabilidad de su cargo, recorrió la región de los Tuxtlas y el reportaje elaborado por Elia Melchi R., nos hace saber de los asuntos tratados en el recorrido de la funcionaria, desarrolla análisis relacionados con los asuntos del campo veracruzano, bien por el reportaje y nos ayuda a saber dónde andamos, para donde vamos y que estamos haciendo o dejando de hacer.
La señora secretaria María Luisa Albores Guillén, se mostró complacida por lo que pudo ver en el campo visitado, creo no vio con la experiencia que da, el conocer a detalle algunos asuntos relacionados con la actividad agrícola, manifestó su aprobación o satisfacción por saber que el maíz sembrado y producido en los Tuxtlas, le coloca como un extraordinario productor del cereal, sin ofender su buen talante para calificarnos, tenemos que saber lo que dicen las estadísticas al respecto.
En general, el campo veracruzano es una vergüenza en cuanto a los rendimientos en campo del maíz sembrado y producido, se dice que la media estatal anda en 2.2 Tons/Ht, en algunas parcelas donde se siembran variedades de calidad superior, se dice que alcanzan hasta 12 Tons/Ht, pero son comunes rendimientos menores de una Ton/Ht la media de estos datos nos daría aprox. 7.1 Tons/Ht, lo cual no es merecedor de halago, aunque cometo una falta técnica al sacar promedio de producción en campo, la diversidad de características del suelo agrícola, hace que los valores promedios sean una falsedad, en fin, la Señora secretaria se fue complacida por lo que vio en la región de los Tuxtlas.
Los rendimientos en campo de regiones maiceras reportan promedio de aprox. 16 Tons./Ht, pero los gringos que desarrollan alta tecnología en lo relacionado a producir en laboratorio, variedades de muy alto rendimiento, tienen promedio de producción de 16 Tons/Ht, pero si atendemos los reportes de valores a los que llegan en algunos campos fertilizados y manejando semillas mejoradas, llegan a rendimientos del orden de 24 Tons/Ht, valores que algunos agricultores mexicanos consideran imposible o milagro.
La explotación del campo reviste características de orden científico que se apartan del trabajo rudo del campesino mexicano, viven esperado la dádiva oficial para su existir, el apoyo económico para compra de fertilizantes, lo desvían en actividades diversas, apartadas por completo de la ciencia agrícola. Hablar de fertilizantes es algo semejante a taumaturgia, y mencionar las micorrizas merece que el campesino solo exprese ¿QUEEEE?, si abordaran el uso intensivo de fertilizantes y aplicación de ectomicorrizas, lograrían los campesinos de Los Tuxtlas rendimientos semejantes o mejores que los gringos.
Definitivamente, en la tecnificación del campo está la salvación del país, trabajar los invernaderos y campo abierto con micro propagación celular y manejo del agua superficial bajo tierra, permitiría dejar de llorar por los estragos en la polinización derivado de los vientos fuertes del norte o la falta de agua por sequias. ¡AGUAS!
Sept. 13 del 2019 lmwolf1932@gmail.com Luis Martínez Wolf |
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