POR INCREIBLE que parezca, y más allá de las cifras alegres de la administración cuitlahuista –carente de un auténtico plan de seguridad, ya que a casi cuatro meses de la toma de posesión aún no cuenta con su Programa Estatal de Gobierno-, en los primeros 28 días de este mes –según nuestro conteo- han sido asesinadas 15 mujeres y otra se debate entre la vida y la muerte, en lo que ha sido una tendencia al alza desde diciembre cuando ocurrieron 11 homicidios; en enero 10, en febrero 11 y ahora, sin que termine marzo 15 -hasta las tres de la tarde-, lo que da un total de 47 féminas asesinadas en casi cuatro meses. Sin embargo, el 11 de este mes, el Fiscal General del Estado, Jorge Winckler Ortiz, anunció que hasta ese día iban 47 mujeres ejecutadas, por lo que si tomamos en cuenta los crímenes ocurridos de entonces a la fecha, serían 58 en total las muertas violentamente hasta este día, una cifra que eriza la piel, ya que no existen antecedentes de casos similares en otros gobiernos en tan poco tiempo. Lo peor es que el gobernador se mantiene agazapado, silencioso, alejado de la realidad, y cuentan quienes le conocen que no atiende a nadie, y cuando acude a giras lo cuida un batallón de casi 50 elementos de la Secretaría de Seguridad. Veracruz, en pocas palabras, no le interesa, y al presidente Andrés Manuel López Obrador ya le cayó el veinte en torno a la inoperancia de esta gestión, a tal grado que ya no recibe al gobernante jarocho, y solo lo atiende el Coordinador General de Política y Gobierno, César Yáñez Centeno, ya que al Secretario de Hacienda, Carlos Manuel Urzúa Macías le cayó mal que Cuitláhuac García se lo haya topado en los pasillos de Palacio Nacional y con un tono igualado le dijera: -quihubo Carlos, cómo vas-, a lo que obtuvo como respuesta del académico, político y economista un: -buenas tardes señor gobernador. ¿Se le ofrece algo?
PERO VOLVIENDO al tema que nos ocupa, y en el que Veracruz encabeza la lista con ciudades como Xalapa, Coatzacoalcos, Papantla y el puerto jarocho que son donde más casos de feminicidios se han registrado este año, el ostracismo, también, invade a organizaciones como la Comisión Estatal de Derechos Humanos, cuya titular, una mujer, prefiere la comodidad del silencio para no incomodar al gobernante y poner en riesgo las comodidades que le dispensa; tampoco la Comisión Estatal de la Mujer ha expresado nada ante semejante masacre, y qué decir de las representes populares en la cámara local de diputados. El tema pareciera no importar a nadie, porque ni las propias mujeres han salido a las calles para exigir justicia, o han llevado a la legislatura puntos de acuerdo para que las autoridades de Seguridad Pública y Procuración de Justicia actúen. Todo pareciera indicar que al soltero gobernador las mujeres le importan menos que un comino, y en ese tenor transcurre su vida, como la canción de la payasita Heidi Infante “el mango: relajado, relajado, relajado”, pues de otra forma no se entiende que nadie en su gobierno levante la voz para contener la aniquilación que lastima al género femenino.
APENAS ESTE jueves, una mujer embarazada fue asesinada junto con su hijo en la comunidad Cascajal, municipio de Acayucan. Ambos recibieron un balazo en la frente, mientras los criminales, al parecer, se llevaron a otra persona. Los agredidos son Catalina Molina Acevedo, de 40 años y su hijo Deyvi Ramos Molina, de 22. El lunes otra fémina fue ejecutada y su cuerpo arrojado en la comunidad de Pacho Viejo, y ese mismo día en Tuxpan, una más fue acribillada y sus restos tirados en la colonia El Seminario. Un día antes, el domingo, el exagente municipal de la congregación Huixcolotla, municipio de Tierra Blanca, Luis Manuel Vargas Rivera, fue asesinado a balazos junto con su esposa, Enriqueta Álvarez Sáenz cuando se disponía a ingresar a su rancho. El mismo domingo, en la localidad Cruz de los Esteros, municipio de Tecolutla, dos mujeres fueron atacadas a balazos por sujetos no identificados. Ambas atendían la coctelería La Rivera, propiedad de ambas. Una se debate entre la vida y la muerte y otra falleció. También el domingo se identificó el cuerpo de una mujer asesinada el día 17, y cuyo cuerpo fue encontrado en bolsas de plástico en un pantano ubicado a 50 kilómetros del puerto de Coatzacoalcos. Se llamaba Ana Victoria Maldonado Gómez, de 21 años, estaba embarazada.
LA MATANZA continuó el día 23 cuando en Cosoleacaque, un pueblo sin gobierno, ya que el alcalde Cirilo Vázquez Parissi vive, tácitamente en Xalapa y la ciudad de México, donde hace campaña a favor de duartistas, ejecutaron a una familia de tres, entre estos una mujer y su hijo de 12 años. Dos días antes, el 21, la recepcionista del Hotel Ilusión de Córdoba fue acribillada al oponerse a un asalto en su lugar de trabajo; los hampones la golpearon salvajemente. Varias parejas que disfrutaban del amor también fueron asaltadas. El lunes 18, una mujer que viajaba con su pareja en un taxi, en Córdoba, fue acribillada. Un día antes, otra dama, embarazada, por cierto, que viajaba en un taxi sobre el camino de terracería que comunica a la localidad Alazán con Monte Verde, municipio de Álamo, fue acribillada. El hombre fue malherido. El miércoles 13, una mujer fue macheteada y asesinada en Isla. El horrendo crimen conmovió a los habitantes ya que prácticamente fue abierta en dos. El martes 5 de este mes, una mujer fue asesinada y su cuerpo arrojado en el tramo carretero entre Maltrata y Ciudad Mendoza. Presentaba huellas de tortura y varios balazos. El domingo tres, en un lote baldío ubicado en la avenida Miguel Ángel de Quevedo, entre Velázquez de la Cadena y Carlos Cruz, de Veracruz fue hallado el cadáver de una mujer degollada y con golpes en el cuerpo. Un día antes, el sábado dos, encontraron el cuerpo de una mujer estrangulada sobre la carretera Las Trancas-Coatepec, y el viernes primero encontraron el cuerpo de una mujer a un costado de la carretera Coatzacoalcos-Villahermosa, dentro el municipio de Agua Dulce. Al lado de la mujer fue hallado un cartel donde un grupo criminal se atribuye su muerte “por traición”.
Y TODO esto ocurre en tanto el Gobierno del Estado mantiene un pleito estéril con el fiscal Jorge Winckler Ortiz, lo que ha provocado que la justicia marche lenta y no, precisamente, acompasada con las instancias preventivas. Unos a otros se culpan de la inseguridad y, mientras tanto, mujeres y hombres son acribillados diariamente en un estado que perdió hace muchos años la paz, pero que en los últimos cuatro años se ha intensificado el problema. A ver si ahora que venga AMLO a la entidad alguien lo entera de lo que está ocurriendo, o MoReNa perderá este bastión en las próximas elecciones. Ya muchas familias han abandonado el Estado en busca de otras ciudades que les brinden un poco de tranquilidad y la gente se sigue yendo. Así de simple. OPINA carjesus30@hotmail.com |
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