Famosa expresión en Latín “Enze et eratro” significa, con la espada y el arado, pretende la expresión destacar el hecho del que se ufanaban los caballeros bien nacidos, en tiempos de guerra manejar la espada y en la paz, saber usar el arado para hacer producir la tierra, fue norma de los colonos, no en país que conocemos sino un territorio dominado por los aztecas que tenían sojuzgados a los diferentes grupos indígenas que habitaban el actual país y tierras más remotas al norte y sur, supieron usar la espada y después… se dedicaron a buscar oro y plata, no fueron ellos los que merecieron el mérito de crear la colonia, los que llegaron después son los verdaderos héroes de la invasión a México.
Hernán Cortes y sus acompañantes, estaban en problemas por ser subordinados a un jefe nombrado desde La Habana, imposible continuar la conquista ante los diversos problemas jerárquicos, Cortes fue inteligente, para superar a Diego de Velázquez, decidió crear un ayuntamiento, con soberanía para funcionar en los territorios a conquistar, creó un ayuntamiento quedando el como autoridad principal, después no supo que hacer, pues el lenguaje y las costumbres de los conquistados le impedían actuar, entonces aparecieron los verdaderos creadores de la Colonia, un pequeño grupo de 12 frailes franciscanos que llegaron en 1520-22, doce hombres que en primera instancia tenían la intención de lograr que los indígenas aceptaran creer en un solo Dios, el que era norma existencial en España y que a su manera, cumplían en sus mandamientos estatutos, Cortez y la soldadesca, habían logrado la conquista usando la espada, pero eran ignorantes políticos y productores agropecuarios para administración de los territorios conquistados.
Se menciona en documentos históricos la intervención de una mujer, Malintzin, llamada por los españoles La Malinche, había sido compañera de Cortes desde su llegada a Yucatán, hablaba el Nahuatl y lo traducía al Maya, aprendió el castellano y pudo ser la interprete durante el recorrido invasor, pero, una golondrina no hace Verano, lograda la conquista La Malinche poco podía ayudar, los Franciscanos que llegaron a evangelizar, procedieron, además de evangelizadores acometieron la instrucción de los indígenas en procedimientos de cultivo de la tierra y manejo de animales domésticos, plantaron la caña y criaron borregos y vacunos, además, no intentaron que los indios aprendieran español, ellos lograron hablar en los dialectos y podían hablar en su idioma a los indígenas conquistados, permitiendo mantuvieran su forma de vida, ilustrándoles con la palabra, logrando que muchos aceptaron de buen talante dar apoyo a la conquista.
Entre los Frailes destacaba por su genial actuar Fray Toribio de Benavente, ilustró a los indígenas para el eficiente uso de instrumentos de labranza, su palabra era respetada, ilustró a los colonizadores que llegaron después de el, facilitándoles su plan de trabajo; la indumentaria sencilla, casi andrajosa, hacia ver como humildes trabajadores a los franciscanos, un soldado preguntó a un indígena como se llamaba el fraile al que tanto respetaban y el indígena respondió en su lengua “motolinia” que se traducía como pobre, pobres, al escuchar la respuesta, Toribio de Benavente expresó, “En adelante ese será mi nombre” este hombre que se denominaba pobre, fue con su palabra y actitud, el creador o logro exitoso de la conquista. “AGUAS”
Marzo 6 del 2019 lmwolf@prodigy.net.mx Luis Martinez |
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