Primero lo eligen y después lo abandonan. Claro que después de Américo, solo Elizabeth Morales podría haberla hecho peor si se hubiera reelegido; y por eso hoy son muchos los que se excusan por haber votado por Hipólito. Pero no se vale…
Si le va mal a Hipólito, nos va mal a todos en Xalapa. Como lo acabamos de ver con el problema de la basura. La mayoría de los ciudadanos la siguieron sacando a las calles, aún sabiendo que no sería recogida; y esa no fue una postura civilizada…
De por sí falto de experiencia y de un equipo adecuado que lo asesore, quienes deberían de apoyarlo lo dejaron solo. Como quedó claro en el convite con el que el Alcalde intentó festejar del Día del Empleado, al que la mayoría no acudió…
Lo que dejó ver que alguien está moviendo las aguas por debajo; pues sabido es que “a la gorra ni quien le corra”. Y le corrieron…
Como también queda claro que a la marcha “por la vida” que se llevó a cabo el sábado pasado, alguien los maneja; independientemente de que a las marchas acudieron para quedar bien -por no decir que hipócritamente- porque muchas de las que desfilaron, entre ellas, de las más participativas, han abortado…
Para entender la psicología del por qué van a las manifestaciones las que han abortado, solo hay que recordar al impresentable dirigente de Pro-Vida, el tal Jorge Serrano Limón, quien estuvo preso en el 2016 por el llamado tanga-gate…
Pues el buen hombre que defendía la vida, desvió 25 millones de pesos de los dineros del Erario para comprarles tangas y otras cosas a las señoras que abortaban en la clínica donde él las enviaba; y que se rumoró que era suya. Pero es casi seguro que recibía su buena comisión. Todo un hipócrita que presumía de bueno…
Que es lo mismo que sucede con los curas, que queriendo pasar por buenos, son la peor escoria de las sociedades a las que parasitan sacando dinero con sus ridículas amenazas de infiernos…
Sin omitir que entre ellos hay incontables pederastas -delito todavía peor que el asesinato- a quienes los demás protegen a ultranza. Salvo muy contadas excepciones; entre ellas, el pobre argentino que se hace llamar Francisco, que ya no siente lo duro, sino lo tupido, por enfrentarse con el sindicato vaticano al que llaman Curia…
Y parece ser que son exactamente los mismos que tras bambalinas manejan la caravana de centroamericanos; aunque finalmente la mayoría de los migrantes se va a quedar en territorio mexicano, ya que difícilmente podrán cruzar hacia EE.UU. tras las amenazas del orate del peluquín rubio que le transfirió la estafeta a su lacayo mexicano…
Y si de por sí no teníamos ningún respaldo ético para exigir que a nuestros connacionales los trataran justamente cuando van al Norte, pues aquí se les trata peor a quienes cruzan por la frontera Sur. Pues ahora menos; porque lo que les espera a los migrantes en su paso por México será un auténtica pesadilla. Y si llegan, va a estar peor…
El problema se solucionaría si nadie los apoyara; pues tendrían que regresar a sus lugares de origen; con lo que nos quitaríamos de encima un problema muy serio. Pero ahí salen otra vez los curas -como el tal Solalinde y demás- que “humanitariamente” los apoyan…
Cuando la realidad es que con ese pretexto siguen sacando dinero de donde pueden, para seguir viviendo en la opulencia, ofreciendo a cambio bendiciones -ya no dan ni estampitas y menos escapularios- que finalmente no sirven de nada y para nada…
Solo hay que ver como vive el impresentable Norberto Rivera Carrera; a quien por cierto le balearon su casa y mataron a uno de sus escoltas. En el parte dice que los demás escoltas repelieron la agresión, pero que el atacante logró huir…
También se dice que cuando los investigadores que luego-luego acudieron -se trataba de un cardenal, o sea, gente de billete- le preguntaron al protector de pederastas si sabía de alguien que quisiera eliminarlo…
Por respuesta se escuchó un largo uuuuujjule de uno de sus guardias, quien agregó: “porqué creé que necesita escoltas y autos blindados”. Haciendo que cualquier mortal se pregunte si eso del Señor Dios de los Ejércitos no son puros cuentos…
El caso es que si sirvieran las bendiciones, los migrantes de cualquier parte del mundo no la pasarían tan mal en su tránsito hacia su destino final, donde por intercesión divina los recibirían con los brazos abiertos….
Pero nada de eso sucede. El todo poderoso que resucita a los muertos y su señora madre, no pueden hacer nada para apoyarlos. Ni siquiera hacerles llover maná del cielo para que todos coman. Ni eso vaya…
Los engañan miserablemente haciéndoles creer en una vida eterna sin sufrimientos, ni enfermedades y gozando de la presencia de su dios; cuando aquí, sin ir a ningún lado, podemos gozar de la presencia, la vista, los milagros y los ejemplos de sabiduría de la vida que nos da La Madre Tierra, en vez de estarla destruyendo.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
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