CONGRUENTE con el famoso año de Hidalgo, se considera que en este mes de septiembre, que ya esta a la vuelta de la esquina, se harán más evidentes los cobros por el uso de la energía eléctrica, la cual, como única empresa en el Estado de Veracruz, cobrará la comisión Federal de Electricidad.
La tendencia, desde el mes de enero de este año, es incrementar paulatinamente, los costos de la luz eléctrica, para todos los sectores de la población, sin importar quien o quienes la utilicen, pues la paraestatal tiene previsto barrer parejo.
Pero eso no es todo, aparte de los incrementos se vienen registrando desde principios de este año, como ya lo comentamos, las mediciones que se realizan en estos aparatitos que registran, supuestamente, el número de kilowats-hora, que se consumen en todos los hogares, se hacen al vapor, de tal manera que cuando llegan estos registros a las oficinas centrales o donde se califican los cobros para elaborar los recibos correspondientes, resulta que dicho consumo es superior al subsidio que normalmente se aplica por disposición federal, resultando que su costo se eleva considerablemente, pues si se llega a pasar por un poco, tendrá que pagar lo real, de acuerdo con las explicaciones que como computadoras, repiten las empleadas de los módulos instalados para atender las innumerables que quejas.
Pues bien, si ya de por sí los incrementos al costo de la energía eléctrica son bastante elevados, debido al castigo impuesto por la federación para el Estado de Veracruz, desde hace muchos años, quizá, por alguna venganza de carácter político, pues ahora, se tiene entendido que a partir del mes de septiembre próximo, el costo de la luz será mucho más caro, de tal manera, que para la mayoría de usuarios, será casi imposible seguirle la carrera alcista de la comisión Federal de Electricidad.
Como es bien sabido, desde hace varios años, no recordamos cuantos, se inició una cruzada en contra de la paraestatal, en virtud de que la entidad veracruzana, era de los Estados de la República, más castigados con el cobro de la luz, toda vez que otras entidades del país, contaban con el amparo federal, tanto que su consumo se regía por la aplicación de otras tarifas distintas a la que se les aplicaba a los veracruzanos, en general.
Ante tal desvergüenza, comenzaron las protestas por todos lados, debido a que unilateralmente se venían cobrando tarifas bastante altas, sin justificación alguna, como sucede hasta la fecha, pero tales manifestaciones de repudio a la CFE, no prosperaron. Es más, ni siquiera se tomaron en cuenta a pesar de que las quejas eran continuas y permanentes.
Ante tal situación, entraron en estas manifestaciones de inconformidad de los habitantes del Estado de Veracruz, los integrantes de la diputación federal veracruzana, alegando, entre otras cosas, que cómo era posible que a Veracruz, se le aplicara una tarifa mas alta que a los demás Estados, cuando bien se sabía que esta entidad era una de las productoras más importantes de la energía eléctrica, donde se había instalado, incluso, la Planta Nucleoeléctrica de Laguna Verde, con todos sus efectos negativos para la vida de muchos veracruzanos, así como por afectar, de la misma manera, el medio ambiente.
Pero no hubo poder humano que hiciera retroceder en sus intenciones al Gobierno federal, de tal manera, que es la fecha en que se sigue sosteniendo la presencia de unas instalaciones en mal estado, con peligro latente de algún escape radiactivo, de acuerdo a opiniones de expertos en la materia que durante el transcurso de estos años, se han venido manifestando.
Pero en fin, estas cuestiones de carácter técnico, pueden quedar al margen, por este momento, cuando el tema que nos ocupa se relaciona solamente con la aplicación sostenida desde hace años, de una tarifa más alta para Veracruz, que para otras entidades del país.
De ahí que hay la pretensión de seguir cobrando la luz al precio que les da la gana y midiendo el consumo, también, de la misma manera, bajo el criterio de personas que debieran tomar los datos de consumo directamente ante los medidores y con el cuidado necesario, a fin de que los resultados sean correctos y no aplicar cobros excesivos a los usuarios.
Agárrese, pues, si usted tiene que pagar la luz en este mes de septiembre, porque el costo será sumamente elevado, el cual, hasta la fecha, no tiene explicación alguna, cuando menos que satisfaga a los consumidores y no solamente a quienes, con criterio personal, elaboran los recibos bimestralmente. La comisión Federal de Electricidad, como también se sabe, es de las dependencias federales, que más quejas recibe en su contra y que muchas, la mayor parte, van a dar directamente ante la Profeco, donde deben estar cansados de justificar tanto robo en poblado.
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BUENA PARTE DE LA POBLACION en México, descarta que la consulta popular que se haga para determinar si se cancela la construcción del nuevo Aeropuerto de la ciudad de México, pueda cumplir con los objetivos de hacer saber al futuro Gobierno federal, lo que conviene más, ya que se considera que aún siendo democrática esta consulta, para los efectos de este tema, resultarían innecesarios, pues se ha dicho que solamente un bajo porcentaje de la población mexicana, hace uso de estas instalaciones, es decir, que no viajan al extranjero ni tienen negocios fuera del país que los hiciera interesarse sobre este tema.
Así las cosas, los resultados de la consulta, no serían exactos, ni tampoco servirían como punto de referencia para tomar una decisión, pues de antemano, se tendría la respuesta a favor de la cancelación, ya que representa mucho dinero que nunca, nadie de la mayor parte de mexicanos, puede digerir tan fácilmente.
La cuestión, entonces, tiene fondo y todo parece ser que se trata de una asunto meramente populista, que le daría al Presidente de la República, la posibilidad de cumplir con la amenaza de cancelar este proyecto, que desde luego, no es todavía entendido por la gran parte de los mexicanos que han tenido la oportunidad de escuchar del tema, porque hay que considerar también, que si usted pregunta en los sectores más marginados del país, le contestarán que desconocen la propuesta y de explicarles, tampoco tendrían una visión clara de lo que significa este conflicto de intereses políticos y económicos entre el gobierno federal y el sector empresarial del país, más aquel que ya tiene contratos firmados para trabajar en este proyecto y que ya están llevando a cabo.
Retroceder, podría desestabilizar políticamente al gobierno federal que comenzará en diciembre próximo y al mismo tiempo, saldría más caro el remedio que la enfermedad, después de que se han aplicado presupuestos que rebasan los cientos sesenta mil millones de pesos.
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Y SIEMPRE SE HA DICHO que la reata se revienta por lo mas delgado, pues esto parece que va a suceder en el próximo sexenio, porque el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, ya se ha deslindado de responsabilidad alguna respecto de lo que hayan hecho sus colaboradores, de tal manera que pronto habrá noticias con relación al caso Odebrecht, tan sonado en muchos países y aquí en México, ni se diga, pues Emilio Lozoya, parece ser la parte más delgada de la reata, de lo que ya habíamos comentado y sería uno de los políticos sacrificados para mantener fuera de toda culpa al propio Presidente Peña Nieto.
Este caso, como otros más que se encuentran latentes por desviaciones económicas de algunos funcionarios, son en los que se centraran las investigaciones y la aplicación de la ley, haciendo extensiva a algunos gobernadores del país, cuyos expedientes ya se encuentran debidamente formulados y con ordenes de aprehensión para cuando terminen las funciones constitucionales de estos personajes.
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Y EL LUNES, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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