A LA traición perpetrada contra la familia Yunes Linares-Yunes Márquez por parte de los alcaldes de Boca del Río y Medellín de Bravo, Humberto Alonso Morelli e Hipólito Deschamps Espino Barros tras la derrota infringida por el Movimiento de Regeneración Nacional al PAN-PRD-MC, se suma, ahora, un hecho que, sin duda, es más justicia que deslealtad: la renuncia a la bancada panista de la diputada –la única congruente en esa fracción-, Cinthya Amaranta Lobato Calderón, y de paso la de Sebastián “chivito” Reyes Arellano –quien al arranque de la actual Legislatura abandonó a MoReNa para pegar el salto al “blanquiazul” en aras de fortalecer al panismo y, paralelamente, languidecer a ese grupo que en el próximo Congreso tendrá mayoría tras el tsunami lopezobradorista del primer domingo de Julio, aunque ahora se sabe que “el chivito” decidió regresar al PAN tras una llamada desde Palacio. Como fuera, a Sergio “bailador” Hernández –y de colofón al gobernador Miguel Ángel Yunes Linares- les están pagando con la misma moneda que ellos aplicaron al iniciar la presente gestión legislativa, cuando presionaron a algunos diputados del PRI para que se sumaran al PAN o se declararan independientes para respaldar las iniciativas oficiales –enviadas desde Palacio o impulsadas por el deleznable “bailador”-. Se recuerda cuando Regina Vázquez Saut (que ha sido panista, priista y nuevamente panista) y el cacique coyutleco, Basilio Picazo Pérez renunciaron al PRI y solicitaron su incorporación al grupo legislativo del PAN, este último para librar diversas acusaciones en su contra. Ambos fueron condicionados por una u otra causa y se fueron a la ex poderosa bancada capitaneada por quien perdió la reciente elección uninominal pese al derroche y sentirse adorado por una sociedad que terminó despreciándolo.
AQUELLAS renuncias inducidas por “el bailador” le permitieron al PAN y al propio Sergio Hernández conservar la Junta de Coordinación Política en el Congreso que, de otra manera habría tenido que entregar a la fracción legislativa de MoReNa que finalmente la ejercerá en la próxima Legislatura. La renuncia de Regina Vázquez Saut, hija del bien recordado ganadero Cirilo Vázquez Lagunes a la bancada priista, la obligó a dimitir, paralelamente, a la Secretaría General del PRI. Horas antes de aquella decisión, Fabiola debió enfrentar el homicidio de su secretario particular, Ángel Viveros López. A los renegados se sumaron aquel año José Luis Enríquez Ambell, hijo del siempre priista, José Luis Enríquez González, ex dirigente Estatal de la CTM, y Rodrigo García Escalante que había sido postulado por el PVEM, y a quien el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares llamó, junto con su padre, “tapaderas de Duarte” aunque, posteriormente fueron acogidos con todo el respaldo, y qué decir del ex morenista Sebastián “chivito” Reyes Arellano que fue de los primeros en mostrar el cobre como, nuevamente, lo ha hecho al renunciar y retornar en menos de dos horas.
CINTHYA AMARANTA Lobato Calderón ha sido, desde siempre, una mujer congruente a diferencia del resto de las damas que integran esa bancada. Fue la única que se enfrentó al “bailador” y al grupo de panegiristas que consintieron todo al nefasto diputado que, de entrada, engañó al electorado argumentado ser abogado cuando ni siquiera había terminado la carrera. Le reclamó el derroche que perpetraba en sus francachelas donde acudían mujeres, corría el alcohol y otras sustancias, además de viandas e invitadas al estilo de las fiestas de la selección mexicana, todo organizado por Carlos “Chico” Fuentes, un hombre que sabe cómo agradar al poder. Cinthya reclamó, también, que el titular de la Junta de Coordinación Política usara los dineros destinados a difusión y promoción en el financiamiento de algunos medios que solo son leídos por sus propietarios y, en otros casos inexistentes, pero en el peor de los asuntos, propiedad de los propios legisladores, lo que puso en evidencia la opacidad del Congreso local y el por qué el “bailador” Hernández luchaba a brazo partido por mantenerse en el puesto arropado por legisladores que recibían pingues sumas, aunque, ahora, lamentablemente para él, se quedará “bailando en la loma”.
DE ESA manera, en medio de las negociaciones para tratar de alcanzar consensos que les permitan “madrugar” la designación del Fiscal Anticorrupción y 12 magistrados “carnales” –que cubran la salida de los que se van-, al “bailador” se le escaparon dos liebres, o más bien una que ya consideraba voto seguro para tratar de amarrar la mayoría calificada sin percatarse que, producto de su soberbia e indolencia está cosechando lo que ha sembrado. Por lo pronto, Lobato Calderón y Reyes –el “chivito”- Arellano presentaron este jueves su renuncia a la bancada panista, y para que le duela al bisoño operador, Cinthya Amaranta podría sumarse en días por venir a la bancada de MoReNa, en tanto Reyes Arellano, que de allá viene, podría regresar al PAN o sumarse al grupo mixto “Juntos por Veracruz” para los tres meses que le restan a la actual Legislatura, lo que le “amarraría las manos” al nefasto “bailador” que ya siente que su barco se hunde y está a punto de naufragar, ya que MoReNa anuncia que exigirá la presidencia de la Junta de Coordinación Política –antes de que inicie la Legislatura que viene-, esto debido a que el PAN ya perdió mayoría al quedarse con 19 (o 20) de los 21 legisladores que se requieren, lo que le impedirá cumplir el sueño a su jefecito del alma de nombrarle a un fiscal “carnal” anticorrupción y 12 magistrados a la medida, en pocas palabras, le está sucediendo lo mismo que a los duartistas al finalizar aquel infausto sexenio.
POR SI fuera poco, uno de los primeros casos que podría analizar e, incluso, procesar y sentenciar la futura Fiscalía Anticorrupción que, por supuesto, no podrá regalarle a su protector, sería el del propio Sergio “el bailador” acusado por diputados del Movimiento de Regeneración Nacional de pretender comprarlos o corromperlos con hasta 5 millones de pesos para votar a favor de los nombramientos del multicitado Fiscal Anticorrupción “a modo” y 12 magistrados que en los próximos días habrá de proponer el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares. Bueno, al menos eso dice la legisladora morenista, Guadalupe Osorno Maldonado que asegura que a los 50 diputados locales les ofrecen el pago de “sobornos” a cambio de realizar la referida votación. El ofrecimiento es para someter a votación la terna que integran: Marcos Even Torres Zamudio, Mónica Gasperín Zanatta y Andrés Domínguez Fernández, pero ni con ello han logrado consenso. Por eso Osorno Maldonado confía en que se logre detener esa designación de quien actualmente ocupa la visitaduría de la Fiscalía General del Estado (FGE), es decir, Marcos Even Torres, en calidad de Fiscal Anticorrupción carnal. En fin, el “bailador” demostró con ello que no es buen cabildeador y mucho menos negociador, y que en la próxima Legislatura pasará a ser un cero a la izquierda en el Congreso, lo que en realidad ha sido siempre. Y es que ya lo sentencia el refrán en casos como el suyo: parecen de oro, enseñan el cobre y terminan valiendo pura m…antequilla. OPINA carjesus30@hotmail.com
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