CORREN los rumores que el sector empresarial de México, comienza por doblar las manos ante la insistencia de Andrés Manuel López Obrador, de querer, si es que llega a dirigir los destinos de nuestro país, cancelar la construcción del nuevo aeropuerto internacional.
Y es que, las encuestas, hasta ahora publicadas, señalan como probable triunfador de las elecciones venideras, al candidato del Partido político Movimiento de Regeneración Nacional, lo que esta haciendo posible que los empresarios de México, principalmente, los que han invertido ya fuertes cantidades de recursos económicos en este proyecto, vean, en la posibilidad de que López Obrador, sea Presidente, el verdadero peligro, no para México, sino para sus propios intereses que tienen en este aeropuerto, como en otros negocios de grandes inversiones económicas.
Si este sector, se raja, casi en los umbrales de las próximas elecciones, entonces, el candidato del PRI, José Antonio Meade Kuribreña, tendría que redoblar los esfuerzos para poder ganar sin el apoyo de los dueños de México, como se ha dicho siempre, en virtud de ser ellos los que manejan la mayor parte de los recursos económicos de México.
Cierto es que los empresarios nacionales e incluso, los internacionales que tienen también fuertes intereses por las inversiones realizadas en el país, se la estarían jugando en serio, pues pudiera correrse el riesgo, como es posible que así sea, de que López Obrador, no ganara y entonces, tendrían que echar marcha atrás y buscar, nuevamente, el apapacho del futuro Presidente, aunque en realidad, no pudiera ser tanto, por la sencilla razón de que es el dinero que mueve a México, y éste lo tienen, desde luego el sector empresarial.
Además, también los empresarios saben bien que de todos modos corren el riesgo, porque si ganara López Obrador, quizá no les hiciera el caso que se merecen o llegaran a merecerse, porque la política del Peje, sería totalmente distinta a la que vemos actualmente, tomando en cuenta lo que hasta ahora ha venido adelantando el mismo candidato morenista.
El asunto esta, por ahora, en la posibilidad de que en verdad los empresarios de México, le den la espalda al PRI, pues ya se ha sabido que entre ellos no existe solamente la preocupación, sino el mismo miedo a perder lo invertido y a no tener, en todo caso, la anuencia de López Obrador, como futuro Presidente de la República.
Así es que, hasta estos momentos, la preocupación de los empresarios, ya externada desde hace tiempo, luego de saber el avance del famoso Peje, en las encuestas que se han realizado, se ha convertido en mero temor, pues están
acostumbrados a ganar en grandes proporciones, tal y como ya lo están viendo con el funcionamiento del nuevo aeropuerto internacional de la ciudad de México.
Y bajo estas circunstancias, el candidato tricolor, tendrá que hacer uso de sus habilidades, de sus propias estrategias políticas, con este grupo o sector poderoso del país, para poder convencerlos, en principio, de que el triunfo electoral del primero de julio, esta asegurado.
Y esto, poco a poco tendrá que irse demostrando por parte del candidato priista a lo largo de la campaña política, pues hasta ahora ha comenzado bien su andar proselitista y seguramente que tendrá que levantar más de lo que sus propios adversarios, lo tienen contemplado, incluyendo, desde luego, al propio López Obrador, que aún no baja punto alguno en las preferencias electorales, cuestión que en verdad asusta a quienes tienen fuertes intereses en la nación, como es el caso de los grandes empresarios que están acostumbrados, como ya hemos comentado, a ganar todo para acá y nada para allá.
El próximo domingo, en su visita a tierras veracruzanas, principalmente, en Cardel, donde tendrá un importante acercamiento con el sector campesino de Veracruz, José Antonio Meade Kuribreña, tendrá que enviar, propiamente, el segundo mensaje más importante, después de su inicio en Mérida, Yucatán, del poder de convencimiento que tiene y la fuerza que el PRI veracruzano, tiene para ganar las elecciones futuras.
Con este acto, Meade Kuribreña, tendrá que aplacar un poco los ánimos de la gente poderosa, como los empresarios, que como ya hemos comentado también, hay rumores de un evidente coqueteo con López Obrador, por la ventaja que tiene por ahora, protegiendo, de esta manera, los intereses económicos que tienen y que se juegan en estas elecciones concurrentes del primero de julio próximo.
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¿Y QUIEN MAS PUEDE AYUDAR a Meade Kuribreña, en este propósito de demostrar que hay poderosas evidencias de que Veracruz, será un triunfador a favor del PRI?.
Claro, ese hombre, ese candidato, lo es Pepe Yunes, quien esta plenamente convencido de que ganará la gubernatura, arrimándole, al mismo tiempo, miles de votos jarochos al amigo de gran parte de su vida.
Por eso, decíamos ayer, se ha producido inesperado movimiento político en todo el Estado, generado desde la propia oficina de Pepe Yunes, donde los operadores políticos pretenden demostrar que tienen el pulso electoral del Estado, y que de verdad manejan el control político, ese control que mucho le han vendido al propio Pepe, asegurándole de que todas las cosas están bien.
Es la hora, a buena hora, del inicio de la campaña política, de que los priistas veracruzanos, le demuestren a Pepe Meade, así como al mismo Pepe Yunes, la confianza que tienen en ellos para seguir gobernando al país y de paso rescatar el gobierno del Estado, ahora en manos de la oposición.
Esa, de alguna manera, es la preocupación que trae en estos momentos el candidato tricolor, a la gubernatura del Estado, porque con el éxito de la convocatoria que tendrá el domingo próximo, dejará claro quien manda electoralmente en la entidad veracruzana, donde las encuestas no tienen nada que hacer, porque el Estado de Veracruz, es diferente en este sentido.
Sin embargo, si las cosas salen mal, aunque hay tiempo de recuperarse, podría ser, sin duda, el principio de un negro porvenir hacia las elecciones venideras del primero de julio.
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BIEN SE SABE QUE uno de los sectores más abandonados en Veracruz, es el campesino, pues ni los gobiernos anteriores, ni el presente han tenido la preocupación de cumplirles lo que históricamente se les ha prometido.
Y decimos esto, porque es precisamente, esta gente la que tenga que encontrarse el domingo venidero, con el candidato tricolor José Antonio Meade Kuribreña, pues el voto verde, como se ha dicho siempre, de los campesinos de México y de Veracruz, en lo especial, son los que, de alguna manera, han determinado en gran parte, los triunfos electorales que se han tenido.
Y no tan solo los gobiernos, sino las mismas organizaciones, como la CNC nacional y la propia Liga de Comunidades Agrarias y Sindicatos Campesinos del Estado, les han dado la espalda permanentemente.
Y como ejemplo, no hay que ir muy lejos, pues actualmente, este sector, aparentemente, ni siquiera dirigente tiene en el Estado, después de que sus propias oficinas de la CNC veracruzana, han permanecido acéfalas por mucho tiempo.
De ahí que el PRI, tendrá que rascarse con sus propias uñas, en la organización del próximo evento campesino con el candidato priista a la Presidencia de la República.
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Y EL LUNES, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
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