ES BUENO, sin duda, que el Gobierno del Estado dé golpes contundentes a la corrupción, que desnude robos cometidos en el pasado y castigue a los autores. La sociedad exige eso y más, porque lo saqueado es dinero de los gobernados, recursos que ingresan a las arcas vía pago de impuestos y servicios, y no se vale que una parvada de delincuentes se lo haya llevado porque así les dio la gana, y solo porque eran autoridad constituida. Hasta allí todo está bien. Lo que acaso se ve mal es que la administración en funciones haya dosificado la persecución o carpetas de investigación, esto es, que se reservara muchos casos que debieron ser combatidos en tiempo y forma, y que ahora, cuando el proceso electoral está en marcha los dé a conocer –cuando ya tenían todo para hacerlo desde hace varios meses-, conscientes de que el combate a la corrupción vende y vende bien al interior de cierto sector de la población hastiada de corruptelas. Tal vez el Gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares –o los asesores de éste- suponen que al difundir la incautación de un rancho al hermano de Arturo Bermúdez en Naolinco –mediante información o publicidad pagada, según aclara Facebook-, se está beneficiando al candidato de la alianza PAN-PRD-MC a la gubernatura, pero en una de esas resulta todo lo contrario y solo se abona a la causa del Movimiento de Regeneración Nacional que de acuerdo al eslogan del mandamás de ese partido, el combate a la corrupción es medular. Porque si revisamos las redes sociales –como lo hicimos este día-, los que más escriben no son los seguidores del yunismo sino los morenistas que argumentan: -por eso debemos votar por ya sabes quién; PAN y PRI son lo mismo, vota por AMLO-, y así por el estilo se observa que no están beneficiando a Miguel Ángel Yunes Márquez, si esa era la intención al seguir destapando la “claoca” en estos tiempos, sino que MoReNa lo está capitalizando, esto es, Yunes abona el terreno de su enemigo.
UNA FUENTE al interior de la Fiscalía Estatal –que, por supuesto, no revelaremos a sabiendas de cómo se las gastan allí-, comentaba al reportero –luego de que el Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares dio a conocer el aseguramiento del rancho de los Bermúdez-: -y lo que falta; tienen preparados varios expedientes que van a ir sacado en las semanas por venir, y creo que habrá hasta nuevas detenciones para dar la impresión de que se sigue combatiendo a la corrupción-, y no lo dudamos ni por un instante, y reiteramos: es bueno que se haga, que se detenga a todos los que robaron y se les decomise lo saqueado, aunque debieron hacerlo antes o después del proceso electoral, pero con eso de que en la guerra y en el amor todo se vale, aprestémonos a nuevas detenciones, carpetas de investigación y todo lo relacionado con el “combate a la corrupción”, en tanto partidos como el Movimiento de Regeneración Nacional capitalizan el vendaval y el PRI guarda silencio, como si no existiera un dirigente Estatal contestatario que rebata otras acciones de la administración en turno, como la entrega de despensas en pleno periodo electoral, a tal grado que tenga que ser el propio candidato del “tricolor” a la gubernatura quien dé la cara para criticar semejantes actos que si bien benefician a la sociedad, deberían suspenderse en aras de la legalidad o, en el mejor de los casos, que los adelanten o los guarden para después de elecciones.
Y ES que el PRI estatal pareciera que no existe, de tal suerte que ha sido José Francisco Yunes Zorrilla quien respondió en torno al aseguramiento de un rancho en Naolinco con valor de más de 40 millones de pesos, presuntamente propiedad de la familia del ex secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, y ante la pregunta de si eso le pudiera afectar en su campaña, el Senador con licencia y candidato de la coalición PRI-PVEM a la gubernatura respondió: “todos estamos resueltos a que quien haya infringido la ley tenga una sanción y un castigo. Mi interés de participar es que en Veracruz haya cero impunidad para los casos de corrupción, y quien haya trasgredido la ley debe tener un castigo ejemplar”. Sin embargo, Pepe Yunes consideró que el caso de la administración anterior –y eso se escucha en todas las mesas y en todas las conversaciones- es ya un anuncio de carácter electoral que evidentemente cada vez va teniendo menos efecto, pero eso no quiere decir que no estemos resueltos a que quien haya incurrido en actos de corrupción tenga un castigo ejemplar”.
EL ORIUNDO de Perote dejó en claro que “Javier Duarte de Ochoa ya está encarando a la justicia, Javier ya está en los tribunales, y mientras eso pasa, en Veracruz siguen los problemas de inseguridad, desempleo y pobreza, y ya no queremos distractores, queremos soluciones a los conflictos de violencia, a los de carencias de servicios y soluciones que le den viabilidad económica a Veracruz. Que haya solución a la pobreza y la marginación que crece y crece y no se soluciona regalando despensas”.
YUNES ZORRILLA tocó un tema que la actual administración, a decir verdad, no ha podido contener, por el contrario, se agiganta y siembra incertidumbre como es el asunto de la inseguridad que, en Veracruz, dice el Senador, “como nunca antes está empeorando, además de que no hay inversiones ni empleos. Es un clamor ciudadano en toda la Entidad y esto tiene que ver con que económicamente el Estado no despega. Padecemos una recesión desde el 2017; no hay inversiones, no hay empleo y eso se expresa en los niveles de violencia que tristemente forman parte del día a día en la Entidad”, y vaya que tiene razón, pues aunque se estén matando entre integrantes de la delincuencia, la percepción social es otra, ya que los daños colaterales como el secuestro, la extorsión, asaltos, robos y levantones siguen a la orden del día arremetiendo, en muchas ocasiones, contra ciudadanos pacíficos.
PERO INSISTIMOS: ¿Dónde está el dirigente estatal del PRI que no asoma la cabeza, acaso temeroso de auditorías a su gestión como alcalde?. Hay quienes comentan que fue un error que un ex munícipe recién salido asumiera la riendas del PRI, ya que por estar más ocupado en aclarar señalamientos administrativos ha descuidado la plaza, y en ese tenor se perciben futuras deserciones como la de Elizabeth Morales, actual delegada estatal del ISSSTE; de integrantes de Vía Veracruzana de Amadeo Flores Espinoza –que ya hasta logotipo tiene manifestando su apoyo a Yunes Márquez-, y un desentendimiento del representante en la Entidad de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Montano Guzmán, quienes no ven con buenos ojos a Zúñiga Martínez, por más que algunos lo consideren el “tribuno de la Atenas Veracruzana”. Vaya decepción y a ver cuántos más pierde el PRI por necedades. OPINA carjesus30@hotmail.com
|
|